Ante la destitución del Coronel Jefe de la Comandancia de Madrid, Ilmo, Sr. Don Diego Pérez de los Cobos Orihuel, la Hermandad de Amigos del Benemérito Cuerpo (HABECU) quiere mostrar su apoyo a este destacado profesional con una hoja de servicios intachable y portador de las virtudes que distinguen al Cuerpo. Consideramos que su destitución no constituye desdoro alguno para una trayectoria impecable, sino que, antes al contrario, añade dignidad y nobleza a su imagen de guardia civil ejemplar, dadas las razones que parecen estar en la causa de su cese.
Honor, sacrificio, lealtad son los principios que deben presidir las actuaciones de los guardias civiles. En ningún lugar aparece la fidelidad. Hay personas que confunden lealtad con fidelidad, y si se trata de políticos, incluso con militancia. Este no es el caso del Coronel cesado, que no ha hecho otra cosa que cumplir estrictamente lo dispuesto en la Ley.
Por otra parte, HABECU quiere reivindicar una vez más la ejemplaridad de la Guardia Civil como Institución al servicio de los españoles y estrictamente cumplidora de la legalidad vigente, con absoluta neutralidad política y ajena a los avatares e intereses de los partidos políticos y sus luchas no siempre limpias por el poder. Y lo hacemos así porque al socaire de esta destitución alguien podría pensar que otros componentes del Cuerpo que no han sido cesados pudieran estar cumpliendo consignas de los políticos de turno, o también que el próximo Coronel que sea designado para el mando de la Comandancia de Madrid viniera ya predispuesto a seguirlas. Eso sería tanto como admitir que la Guardia Civil está al servicio del gobierno y no de la Nación y nada más lejos de la realidad. La Guardia Civil no es una herramienta que el gobierno de turno pueda usar a su antojo en favor de sus intereses partidistas.
Redundando en esta idea, este es el camino que marca con su dimisión el Director Adjunto Operativo de la Guardia Civil, el Teniente General Ceña, que no podemos interpretar más que como una muestra de solidaridad con el Coronel y respaldo a su decisión de negarse a informar sobre asuntos sometidos a la reserva de las actuaciones judiciales. Es el camino de la lealtad, el sacrificio y el honor. No puede haber final más digno para un guardia civil.